Por: Christiam Cordero
Planificador - IBMETRO
Los inicios de la metrología
El origen de la metrología se remonta hace miles de años atrás, cuando el hombre siente la necesidad de medir las cosas rutinarias de su vida diaria, como, por ejemplo, las distancias, la temperatura, el tiempo, la masa, entre otros; o empieza a organizarse por oficios, como por ejemplo la agricultura, el comercio, etc.; y empieza a realizar transacciones comerciales; en esencia, sentía la gran necesidad de lograr crecimiento y desarrollo de su civilización. Para ello, decide utilizar, como primeras unidades de medida, partes de su propio cuerpo: sus brazos (el codo o la braza), manos (el palmo o la pulgada) y sus pies (el pie), etc.
Un dato curioso es que uno de los primeros patrones, sin fundamento corporal, es una regla graduada a las rodillas de dos estatuas del Rey Dios Gudea, allá por el año 2.500 a.c., en el periodo del “Renacimiento Sumerio” de la antigua Mesopotamia.
Desde ese entonces, se fueron desarrollando y consolidando varias unidades de medida en distintos lugares del mundo, bajo ciertas características propias del lugar y contexto socio económico; arrastrando consigo el problema de su estandarización o su homogenización, que solo hasta el año 1795 tiene un primer esfuerzo de solución, con la introducción del Sistema Métrico Decimal, que se extendió con éxito por varios países de Europa.
Otro hito importante es la llamada “Convención del Metro”, firmado en 1875 por diecisiete países, con la intención de uniformar las “mediciones” a nivel internacional, creando además la Oficina Internacional de Pesas y Medidas (BIPM por sus siglas en francés) y la Conferencia General de Pesas y Medidas (CGPM por sus siglas en francés).
Finalmente, la onceava reunión de la Conferencia General de Pesas y Medidas, en 1960, le dio al sistema, el nombre de Sistema Internacional de Unidades.
La metrología en Bolivia
En Bolivia, la metrología tiene su origen oficial, con la promulgación de la Ley Nacional de Metrología, allá por el año 1978, aún vigente, que establece la política nacional a ser aplicada en materia de metrología, y el funcionamiento del Servicio Metrológico en el ámbito nacional (SERMETRO), dependiente del entonces Ministerio de Industria, Comercio y Turismo (MICT), como instancia de ejecución metrológica.
Esta Ley consta de tres partes en su contenido:
a) La primera, asociada al corazón y a la naturaleza de la metrología, describiendo aspectos relacionados con la metrología científica, metrología industrial y metrología legal. Presenta como uno de los primeros retos: la implementación y la aplicación del Sistema Internacional de Unidades en todo el territorio nacional, además de incluir su estudio en el sistema educativo nacional.
b) La segunda, asociada a los arreglos institucionales planteados para su aplicación, incluyendo como parte del SERMETRO a una Comisión Asesora, una Oficina Central de Metrología, un Laboratorio Central con Regionales de Metrología y finalmente Oficinas Regionales de Inspección.
En el caso de la Comisión Asesora, la misma está conformada por 9 ministerios del nivel central del Estado, alcaldías municipales, Corporaciones de Desarrollo, Universidad Boliviana, Cámara Nacional de Industria y la Cámara Nacional de Comercio. La Oficina Central operativizaría las decisiones emanadas por la Comisión Asesora, para finalmente aterrizar la metrología en un laboratorio central, laboratorios regionales y de inspección.
c) La tercera, refiere al establecimiento del régimen sancionatorio ante su incumplimiento, no existiendo referencia explícita de las infracciones, estableciendo además instancias para las sanciones, que van desde la amonestación hasta la aplicación del código penal.
A 43 años de promulgada esta ley, quedan muchos temas en debate y reflexión, sobretodo, porque el modelo actual de Estado no es el mismo, pues se cuenta con una nueva Constitución Política del Estado, un nuevo marco autonomías, un nuevo sistema de regulación sectorial, un nuevo marco de planificación estratégico y un nuevo modelo económico.
El nacimiento del Instituto Boliviano de Metrología
En abril de 1995 la Comisión del Acuerdo de Cartagena aprobó con la decisión 376, la creación del Sistema Andino de Normalización, Acreditación Certificación Reglamentos Técnicos y Metrología, que en Bolivia se traduciría en el año 1997, en el Decreto Supremo N° 24498 de creación del Sistema Boliviano de Normalización Metrología, Acreditación y Certificación (SNMAC), con el fin de promover en los mercados, la calidad y la competitividad del sector productivo o importador de productos y servicios; fortalecer la capacidad exportadora y promover la inversión; coadyuvar con las entidades competentes, para garantizar la seguridad y la salud de la vida humana, animal y vegetal; la protección del medio ambiente y la protección de los intereses del consumidor.
Además, ese 17 de febrero de 1997, también se establecería uno más de los hitos relevantes para la metrología de nuestro país, se crea y nace el Instituto Boliviano de Metrología (IBMETRO), cuyo objetivo principal fue la de administrar el SERMETRO, de manera complementaria, el año 2001, se consolidaría sus funciones, mediante Decreto Supremo 26050, describiendo a continuación, las más relevantes: a) Ejecutar las directrices emanadas del Concejo Nacional de la Calidad mediante la Comisión Ejecutiva del SNMAC, b) Establecer un sistema uniforme de medidas, que garantice la confiabilidad de mediciones en los diferentes campos donde actúa la metrología, c) Proponer a las autoridades sectoriales, la elaboración de procedimientos obligatorios legales y normas metrológicas que el instituto considere necesarias, para salvaguardar los intereses del consumidor y para la prosecución de los objetivos legítimos del Estado, d) Establecer la estructura básica metrológica en el país, de acuerdo a la Ley nacional de Metrología en función de los requerimientos de medición de la industria y el comercio con una gradualidad que garantice el mantenimiento del nivel técnico en las mediciones; sin duda, una precisión ausente pero necesaria, en el marco normativo predecesor.
Bajo este nuevo contexto, el IBMETRO inicia sus operaciones prestando sus primeros servicios: calibración de balanzas y verificación de estaciones de servicio; servicios que fueron ampliándose hasta lograr 6.890 servicios en el año 1998. Ya para el año 2003, se llevarían alrededor de 50.000 servicios, haciendo evidente la necesidad de iniciar la desconcentración de los servicios, mínimamente, en el eje central, llevando de esta forma la metrología, a las unidades productivas locales de nuestro país.
De esta forma, la oficina regional de IBMETRO en Santa Cruz comienza a prestar servicios, el 1° de diciembre del 2003 y un año más tarde, lo hacía la oficina regional en Cochabamba, siguieron las oficinas regionales en Tarija (2014), Chuquisaca (2015), Beni (2017) y Pando (2019).
La Cooperación Técnica de Alemania
Uno de los actores fundamentales para el crecimiento, fortalecimiento y desarrollo de la institución, fue sin duda alguna el Physikalisch Technische Bundesanstalt (PTB), organismo de metrología de Alemania, referente mundial en materia de metrología, con 135 años de vida, quien acompaño las operaciones de IBMETRO desde sus inicios, fortaleciendo las competencias del personal, asistencia técnica y equipamiento, todo ello para el aseguramiento de las mediciones a nivel nacional.
Consolidación de IBMETRO, construyendo calidad para Bolivia
En su aniversario número 25, el Instituto Boliviano de Metrología, ha logrado cerca de un millón doscientos mil servicios en metrología industrial, metrología legal y acreditación a nivel nacional, teniendo como clientes consolidados a varios actores relevantes de la economía nacional actual, como Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Corporación Minera de Bolivia (Comibol), en los sectores estratégicos, Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa), Empresa Azucarera San Buenaventura (Easba), Empresa Estatal Yacana, Boliviana De Aviación (BOA), Depósitos Aduaneros, Servicio de Desarrollo de las Empresas Públicas Productivas (Sedem), Aduana Nacional, Servicio Nacional de Verificación de Exportaciones (Senavex), Servicio Nacional de Propiedad Intelectual (Senapi), Empresa Nacional de Telecomunicaciones S.A. (ENTEL), Administradora Boliviana de Carretas (ABC), Empresa Pública Productiva Cementos de Bolivia (Ecebol), Empresa Boliviana de Alimentos y Derivados (EBA), Servicio Nacional Textil (Senatex), y otras empresas privadas, en los sectores productivos, aportando con ello a la consolidación del Modelo Económico Social Comunitario Productivo, núcleo de la Agenda Patriótica y del Plan de Desarrollo Económico y Social 2021-2025.
Construyendo calidad con alianzas estratégicas
El futuro es por demás alentador, pues se espera llegar al Bicentenario de nuestro país, con un valor acumulado de al menos un millón y medio de servicios en todo el territorio nacional, servicios enmarcados en la continuidad de las políticas de desarrollo implementadas a lo largo de estos años, pero también en nuevas políticas productivas, tales como la consolidación de la industria del litio, el desarrollo de la industria de la química básica, el desarrollo de la industria de los fertilizantes o la consolidación de la industria de los biocombustibles, siendo evidente la necesidad de agotar los esfuerzos de sensibilización a estos actores productivos y generar alianzas y sinergias estratégicas con los mismos. Por otro lado, en el marco de la estrategia de Defensa del Consumidor, se tiene previsto establecer alianzas estratégicas con distintas entidades y organizaciones para fortalecer a las unidades productivas, encarar un trabajo coordinado en la defensa de los derechos de usuarios y consumidores.
Construyendo Calidad, con reactivación de las inversiones
El incremento de servicios y la ampliación de su cobertura, requiere sin duda la consolidación del proceso de desconcentración iniciado años atrás, proceso integral que requiere tres elementos fundamentales para su éxito, la asignación de recursos humanos especializados y competentes, el equipamiento necesario para la prestación de los servicios con calidad, y finalmente, una infraestructura adecuada para el óptimo funcionamiento de sus operaciones; éste último recién encarado en la gestión 2019 con la construcción de oficinas y laboratorios propios en la ciudad de Santa Cruz y años más tarde con el inicio de las oficinas y laboratorios en Chuquisaca, ambos detenidos por el gobierno de facto, y reactivados en 2021. Se tiene previsto, en los siguientes años, una importante inversión de infraestructura en la ciudad de La Paz, Cochabamba y Beni, haciendo una inversión acumulada y proyectada de alrededor de 70 millones de bolivianos.
Construyendo Calidad con Reconocimiento Internacional
Pese a que el marco normativo vigente, establece la exclusividad de los servicios del IBMETRO en el territorio nacional, se buscó demostrar su competencia técnica a nivel internacional, para asegurar la confianza de clientes y consolidar la Infraestructura de la Calidad en Bolivia. Es por eso que, el 2015, con un gran esfuerzo, el área de metrología industrial, logra el Reconocimiento Regional del Sistema de Gestión Calidad ante el Sistema Interamericano de Metrología (SIM) y la Declaratoria Internacional de capacidad de medición y calibración ante la Oficina Internacional de Pesos y Medidas (BIPM) de sus magnitudes principales asociadas: Masa, Material de Referencia, Volumen, Temperatura, Humedad; Bolivia ratificaba a nivel internacional, su condición de Organismo Competente para la Metrología los siguientes 5 años. Lastimosamente, el año 2020, pese al gran esfuerzo realizado, la anterior administración no estableció ninguna acción para el mantenimiento del sistema, poniendo en riesgo el reconocimiento otorgado.
No obstante, fieles con el compromiso de la Calidad, el 2021 se retomó el sistema de gestión, se asignó el recurso humano responsable de ello, se destinó recursos económicos para la trazabilidad de los patrones nacionales, se actualizaron los procedimientos, para lograr nuevamente el mantenimiento del sistema de gestión y con ello un nuevo Reconocimiento Internacional, recuperando la calidad de los servicios del IBMETRO.
Bajo este mismo espíritu, la Dirección Técnica de Acreditación inició el camino hacia su Reconocimiento Internacional para entidades que acreditan a Organismos de Evaluación de la Conformidad (IAAC-ILAC).
De igual forma, la Dirección de Metrología Legal también busca el Reconocimiento Internacional del Sistema de Certificación ante el Organismo Internacional de Metrología Legal.
IBMETRO es un actor y un pilar fundamental de la Infraestructura de la Calidad de nuestro país, cuya estrategia “Construyendo Calidad” debe articularse a las políticas de desarrollo previstos en el Modelo Económico Social Comunitario Productivo, el Plan de Desarrollo Económico y Social 2021-2025 y la Agenda Patriótica al Bicentenario, apoyando a la generación de productividad y calidad en cada uno de los sectores productivos de nuestro país.